Ayers Rock 1: bicholandia

A las 4:30 aproximadamente me desperté y a eso de las 5 aparecieron dos tipos sin maletas ni nada y se pusieron a dormir en dos literas. Que horas más raras de hacer el checkin. A las 6 se levantaron Iván y Carlos. Con Iván fuí al Mcdonald's a aprovechar el último momento de Internet gratis y luego fuimos a desayunar. Nuestra última comida en este albergue que si bien no era tan guarro como el otro, probablemente sea el segundo más guarro en el que hemos estado nunca.

A las 7:45 bajamos a la calle, ya con las mochilas, a esperar el shuttle bus. Allí hay un montón de empresas que ofrecen este servicio por lo que hubo un momento de confusión en el que por poco nos subimos en otro.

Finalmente llegamos al aeropuerto, facturar y a esperar un ratito hasta la salida del vuelo. Mientras esperábamos vimos un equipo de basket que parecía de la primera división australiana, pero no los conoce ni su madre XD. El vuelo salió con un poco de retraso pero aparte de eso y de que me dejé la baraja en la redecilla del asiento, no hay mucho que contar.

El aeropuerto de Ayers Rock es de risa, parece más un aeródromo que otra cosa. Una vez aterrizado, el avión tuvo que volver por la misma pista para llegar a la "terminal". En esta solo hay una cinta para las maletas y tal cual aterrizas ya casi las tienes saliendo. Y una vez recogidas ya no queda NADIE en la terminal.

Recogimos las maletas y fuimos al mostrador de Avis (a 5 metros de la recogida XD). Allí nos esperaba un Vauxhall Omega (Vauxhall es Opel en los paises anglosajones). Fuimos hasta nuestro alojamiento e hicimos el checkin. En este caso no era un albergue al uso. Tienen montado un ressort con multitud de servicios para la gente que visita esta zona. Es bastante caro el alojamiento así que han montado también una parte con habitaciones y servicios compartidos para aquellos que no queremos pagar tanto.

Después de dejar las cosas en la habitación fuimos a comprar al único super que hay. Que caro es todo en este super, se aprovechan MUCHO de ser los únicos de la zona. En el super tuvimos nuestro primer encuentro con una especie de ciempiés gigantes que pulula por todas partes, es realmente asqueroso.

Nos hicimos unos macarrones buenísimos pero con unas medidas desproporcionadas, nos salieron 6 platos XD. Comimos la mitad y la otra para otro día. Luego cogimos el coche para ir a ver la puesta de sol al Monte Uluru. Tanto Uluru como el Kata Juta están situados dentro de una especie de parque protegido y se tiene que pagar entrada (eso no lo pone en ninguna guía ni página web ni nada). Cuesta 25$ (15€) y sirve para 3 dias consecutivos.

Tras pasar por el peaje nos dirigimos al punto de observación de la puesta de sol. Aún era bastante pronto por lo que tuvimos que esperar un buen rato en el que vimos unos camellos de lejos y muchas moscas de cerca XD. No sé si es porque estamos en la época de lluvias pero está todo muy verde (no parece el desierto) y nublado. Esto hizo que la puesta de sol fuese decepcionante ya que las nubes lo tapaban y no se vió mucha cosa.

Regresamos al ressort y tras hacer la colada (lavadora y secadora, jeje) nos fuimos un rato a la piscina. No hace un calor muy muy fuerte (en parte porque está nublado) pero siempre hace calor. En la piscina estábamos solos y eso, combinado con que era ya de noche y el agua estaba turbia, daba una sensación extraña.

Después de eso cena y cama que al dia siguiente había que madrugar. La crónica está escrita junto a la siguiente pero para que quede más ordenado las separo en dos.